Ubicados en Santiago Atitlán, Guatemala, somos un beneficio familiar con tres generaciones de experiencia cafetalera. Trabajamos junto a pequeños productores, perfeccionando procesos técnicos para resaltar cada grano. Nuestra misión combina tradición, innovación y compromiso, elevando el café local a estándares de calidad mundial.
Nuestro legado
Nuestro legado se remonta a mediados de los años 80, cuando José Ramírez Tziná, conocido cariñosamente como Magarciy, y su esposa Juana Yataz Chavajay iniciaron la historia del café en nuestra familia. Con visión y esfuerzo, estableció las bases de una cultura cafetalera comprometido con la calidad y el apoyo a pequeños productores. Su dedicación inspiró a las siguientes generaciones a mantener viva esta tradición, integrando nuevas técnicas y un profundo respeto por nuestra tierra y comunidad.
Nuestro compromiso
Colaboramos con aproximadamente 1700 pequeños productores locales, promoviendo su desarrollo a través de prácticas sostenibles, trazabilidad y reconocimiento de la calidad de su café. Brindamos apoyo técnico, precios justos y acceso a mercados de alto valor, garantizando que cada productor reciba el mérito por su trabajo. Este compromiso refuerza las tradiciones cafetaleras y genera un impacto positivo en las comunidades, destacando su excelencia a nivel global.
Misión
Producir, procesar y comercializar café de alta calidad mediante técnicas y prácticas sostenibles e innovadoras, promoviendo el desarrollo socioeconómico de la región. Fortalecemos el manejo responsable y eficiente de nuestros servicios; comprometidos con la excelencia para satisfacer las demandas de los mercados regionales, nacionales e internacionales.
Visión
Posicionar el café de la región Atitlán a nivel nacional e internacional, contribuyendo al desarrollo sostenible de la comunidad y su cultura. Ofrecer a nuestros clientes una experiencia auténtica y excepcional en cada producto y servicio,
